El malojillo es una planta originaria del sur de la India, pero hoy en día se puede encontrar también en zonas tropicales y subtropicales. Sus hojas y su aceite se han utilizado como medicinas para aliviar enfermedades y otras dolencias, y puede utilizarse al natural, desecada o extraída de su esencia natural.
Propiedades de Malojillo
Es una de las hierbas más buscadas para los remedios caseros, debido a su aroma y propiedades.
Una taza de malojillo no contiene grasa, ni colesterol y un gramo de proteínas, así como vitaminas A, C, B2, B3, B5, ácido fólico, magnesio, fósforo, potasio, calcio y hierro.
Algunos beneficios para la salud
Con propiedades astringentes y antisépticas, se ha utilizado durante mucho tiempo como tónico y limpiador para las pieles grasas o con tendencia al acné. Ayuda a fortalecer los poros. Debe tenerse precaución al utilizarlo, ya que en algunos casos su uso sin diluir puede causar irritación de la piel. Ayuda a mantener el control de funciones importantes como la digestión, la excreción y la respiración. Refuerza el mecanismo de defensa inmunitaria del organismo. Facilita la diuresis, eliminando así los residuos tóxicos del cuerpo y regulando las funciones de órganos como el riñón y el hígado.
Reduce los niveles de ácido úrico
Tiene muchas propiedades antioxidantes y puede proteger las células de los radicales libres, estimulando así la regeneración celular.
Ayuda a purificar la sangre y estimula la producción de glóbulos blancos.
Gracias a sus propiedades antibacterianas y antifúngicas, puede tratar eficazmente las enfermedades de la piel, la sarna y las infecciones.
Gracias a su alto contenido en vitamina C, ayuda a aliviar la congestión nasal, la gripe y otras enfermedades respiratorias (como el asma bronquial).
Así que si quieres tomar tu té de malojillo, puedes hacerlo con la confianza de que fortalecerá tu sistema inmunológico y te aportará nutrientes que serán muy beneficiosos para tu salud.